Las primaveras y los otoños son por su colorido espectaculares, y en el verano huiremos de los dias de más calor en cualquiera de sus rios, donde se reunen los jóvenes de éste y de los pueblos vecinos, especialmente de Robledollano con los que les une algo más que la vecindad territorial. En primavera tiene lugar la explosión del color y de la vida en el monte, florecen los olivos, las jaras, el romero, la retama, el madroño, el tomillo, etc.; los pajarillos entran en plena efervescencia, nacen las primeras crias de las ciervas, jabalíes, corzos, etc. Por su parte el otoño, también es precioso en su colorido pues el arbolado de hoja caduca como el castaño o el roble la pierden, y además tiene lugar acontecimientos como la berrea del ciervo, cuyas peleas con los machos rivales resuenan por el valle. En el invierno tienen lugar algunos rituales tradicionales y en los que participa todo el pueblo debemos destacar la matanza del cerdo, la recolección de aceitunas, y antes de castañas, y la costumbrista lumbre de los quintos. Como ve siempre es buen momento para visitar esta tierra. |
El agua mana por todas partes. Su término municipal es regado por tres rios y una multitud de regatos, arroyos, riachuelos y fuentes. El rio Viejas se une con el Ibor a unos tres km. del pueblo en dirección a Robledollano, a su vez el rio Ibor desemboca en el Tajo a la altura del Pantano de Valdecañas. En el mes de mayo los barbos que viven en este pantano y que algunos alcanza tamaños considerable, remontan el rio Ibor buscando las aguas mas limpias y puras para desobar y reiniciar así el ciclo de la vida, es todo un espectáculo y realmente poco conocido. El agua es tambien abundante bajo el suelo, de hecho en las cuevas se tiene conocimiento de la existencia de lagos subterráneos que seran en breve abiertos al público. Hay tantas fuentes que incluso se podrian hacer rutas uniéndolas y disfrutando la naturaleza a cada paso. |
FLORA: Desde el sotobosque, el monte bajo, el arbusto y hasta el arbolado todo es tipicamente mediterráneo. Hay que destacar la distinta y variada vegetacíon, perceptible incluso por el profano en botánica, entre la solana y la umbria .En la solana la vegetación se caracteriza por su resistencia a los contrastes, a las sequias y a las altas temperaturas de los meses centrales del verano, predomina aquí el olivo,la jara, el acebuche y la encina. En la umbria la humedad es mayor y la temperatura más fresca existe una mayor presencia vegetal y de origen más primitivo, destaca el alcornoque, los quejigos, cornicabras, y el castaño. El monte bajo es abundante por todas partes: romero, tomillo,.... En las orillas de los rios y arroyos tenemos auténticas vias de alisos, chopos, fresnos o sauces. Todo ello sirve de alimento natural a la variada fauna existente en nuestra zona, desde la hierba para los cervidos, hasta las bellotas para los porcinos y roedores. |
FAUNA: Su relieve agreste acoge una gran variedad faunística. En cuanto a las aves que nos encontramos por estos cielos destacan las grandes rapaces y carroñeras, desde águilas, halcones milanos, helanio azul, buhos, o buitres, leonados y negros, cigenas. Tambien pájaros de mediano tamaño como el mirlo, la perdiz, la codorniz, la urraca,la oropéndola, y multitud de pequeños pajarillos (gorrión, jilguero, verderón, martin pescador, golondrina, etc). Pero los reyes de la zona son los grandes mamíferos, como el venado, el corzo, el gamo, el muflón, la cabra montes o el jabalí. A nada que nos detengamos en nuestro caminar y con un poco de atención no tendremos dificultades en divisar, sin necesidad de potentes prismáticos, fundamentalmente ciervos y gamos, más dificultades tendremos para ver corzos o jabalís, pero no porque escaseen, todo lo contrario, sino por lo huidizo y tímido de estos animales. En los rios existe tambien diversidad de vida animal, desde los ya citados barbos, las truchas y demas pececillos de rio y culebrillas, cuentan tambien estos rios con aves como el mirlo y el martín pescador, con especies de tortugas, con hurones y con gran variedad de roedores que encuentra en el agua y en las vegas su hábitat. No muchos años atrás también podiamos observar mejillones de rio, existentes aún en algunos puntos del rio Ibor, pero escasos, y cangrejos de rio, hoy los que hay no pertenecen al autóctono cangrejo de rio ibérico sino a especies de cangrejo rojo americano que introducidos en este sistema acabaron con el autóctono, pues fue el introductor del hongo que acabo con éste. |